Air Jordan: arrasando con todo

El mejor jugador de todos los tiempos, desde el principio, había dejado destellos que demostraban su calidad, pero siempre se le achacaba que no era un ganador de campeonatos y que no sería capaz de llevar a los Chicago Bulls al nivel de otras franquicias ganadoras como: los Philadelphia 67ers, Los Ángeles Lakers o los Boston Celtics.

Desde que llegara a la ciudad del viento, siempre había asegurado que ese era su principal objetivo, por encima de premios individuales. Sin embargo, la calidad que atesoraba le hizo cambiar el rumbo de sus planes y los premios individuales llegaron antes de los colectivos.

En la temporada 1984/85 los Chicago Bulls lograron un récord, para nada envidiable, de 38 victorias por 44 derrotas. Aun así, consiguieron clasificarse para los playoffs gracias a Michael Jordan, quien en su primera temporada en la NBA promedió: 28’2 puntos, 5’9 asistencias, 6’5 rebotes y 2’4 robos. A pesar de los estratosféricos números del 23, los Bulls sucumbieron ante los Milwaukee Bucks por 1-3, ya que hasta 2003 la primera ronda de la fase final de la temporada se jugaba al mejor de cinco partidos y avanzaba el que ganara cuatro. Sin embargo, todo el esfuerzo de Jordan durante la regular season no cayó en saco roto, ya que consiguió alzarse con el Rookie of the Year (novato del año).

Como tributo a su primera gran hazaña, Nike lanzó este par de zapatillas. La historia detrás de este modelo se esconde en el color principal de las mismas, ya que en la ceremonia de la entrega del premio, en la que se repartían otros premios como el mejor defensor del año o el MVP, Jordan vistió una camisa de color marrón, que es la que se ha plasmado en las Air Jordan 1 “Rookie of the Year”. Además, en la lengüeta lateral está serigrafiada una frase que pronunció en el discurso, junto con algunas de sus estadísticas de la temporada.

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Dos meses después de alzarse como el mejor novato de la temporada Nike organizó una gira por Italia con motivo tanto de la promoción de la marca personal del deportista como de su línea de zapatillas. Así, terminó jugando un partido benéfico en Trieste, entre el Juve Caserta y el Stefanel Trieste. Durante la exhibición “the GOAT” (Greatest Of All Time) calzó unas Air Jordan 1, negras, blancas y con un tono naranja llamativo, basadas en los colores de la indumentaria del equipo anfitrión, el Trieste. Pero el hecho inédito, que hizo de esas zapatillas algo especial, fue una acción en concreto. En una jugada, la joven promesa alzó su vuelo por encima de los jugadores italianos para culminar con un violento mate que terminaría destrozando la canasta. De ahí viene el nombre del modelo: Air Jordan 1 “Shattered Backboard”. Tras el parón necesario para cambiar la canasta, terminó el partido con 30 puntos, demostrando por qué era el mejor, ya que no ahorró en esfuerzo nunca, ni siquiera en un partido intrascendente como este.